lunes, 14 de mayo de 2012

La Iglesia espera un milagro para beatificar a José Gregorio Hernández

Diputados socialistas están tras la búsqueda de una curación extraordinaria que sea prueba suficiente, para el Vaticano, de lo que el pueblo avala con su fe. El parlamentario Christian Zerpa explica que también se plantea llevar una parte de los restos a Isnotú, su pueblo natal
José Gregorio Hernández no será santo para El Vaticano, pero sí, para el pueblo. Basta acercarse a la iglesia de La Candelaria para corroborarlo. En los alrededores del templo venden velas con el rostro del “médico de los pobres”, estampitas, escapularios. Tal día como hoy, 26 de octubre, cuando se cumplen 147 años del nacimiento del Venerable, este lugar se llena de fieles que acuden a solicitar favores o a pagar promesas.
La Iglesia Católica espera un milagro -en función del procedimiento que establece el Derecho Canónico- para que Hernández pueda ser beatificado, explica el diputado Christian Zerpa, del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). El Vaticano nombró a un nuevo postulador por Venezuela (monseñor Fernando Castro), y ahora le toca a la colectividad dar fe de curaciones inexplicables.
“Los milagros que se tramitaron no surtieron el efecto, porque no eran lo suficientemente contundentes”, refiere Zerpa. Sin embargo, el parlamentario cuenta otras versiones, no oficiales, suministradas por sacerdotes: “El pueblo hizo santo a José Gregorio, y a la alta jerarquía católica no le interesa legitimar algo que se dio por la vía de los hechos. También es cierto que José Gregorio intentó integrar la fe y la ciencia, y tenía posiciones políticas, por lo que no es una persona fácil para la óptica de la Iglesia”.

ALGO INEXPLICABLE

A pesar de estos comentarios -ciertos o no- diputadas y diputados del PSUV mantienen su cruzada para lograr que Hernández suba a los altares con todas las de la ley. Ya superó las pruebas para ser Venerable, pero faltan las que le permitan ser Beato y, después, Santo.
“Estamos haciendo un llamado para que toda persona que tenga un milagro posiblemente hecho por José Gregorio, lo tramite ante la Iglesia más cercana, lo lleve a la Asamblea Nacional o al PSUV. Si una persona tiene una cura milagrosa, puede exponerla”, destaca.
-¿Qué es un milagro para la Iglesia?
-Para la Iglesia el milagro es la evolución positiva de un paciente sin que exista explicación científica que explique esa evolución, la cual se supone que ocurrió por la intermediación del futuro santo, quien intercedió por la vida de la persona.
Emiro Suárez, párroco del santuario Niño Jesús de Trujillo, refiere -en conversación telefónica con el Correo del Orinoco- que un milagro, para la Iglesia, es “un hecho extraordinario”. Suárez pone el ejemplo de una persona que tiene cáncer y que, tras operarse y recibir quimioterapia, se cura, y sostiene que “eso no es un milagro; el milagro sería una curación sin explicación científica”.
María José Carrero, una de las vendedoras que ofrece artículos de José Gregorio en los alrededores de la Iglesia caraqueña, tiene su propio hecho fuera de lo normal: su excuñado, muy grave de salud, se aferró a una estampita del “médico de los pobres”, y ahí está.
Carrero atestigua cómo centenares de fieles de todas partes del mundo acuden al templo a cumplir su acción de gracias. “La gente viene por José Gregorio”, cuenta, aun cuando el estado de la Iglesia “no es el mejor”. A su juicio, la estructura “se está cayendo”.

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